Mujer joven buscando alimentos para una cena ligera y nutritiva.

Mitos y realidades de una cena ligera y nutritiva

Una cena ligera y nutritiva cumple un papel en tu bienestar y buen descanso. Aquí te contamos su importancia y la realidad de algunos mitos muy comunes.

Después de un largo día de escuela o trabajo, una rutina para dormir es ideal para conseguir un adecuado descanso. Dentro de este ritual es importante considerar la cena, pues es esa comida del día la más próxima al reposo. Por ello, te recomendamos que sea una cena ligera y nutritiva, y dejar atrás ciertos mitos que se creen sobre ella.

Una cena ligera y nutritiva depende de cada persona, ya que aquellas que practican ejercicio físico pueden cenar de manera más abundante para reponer el glucógeno gastado y mejorar la regeneración muscular durante el entrenamiento. Lo ideal es consultar las porciones adecuadas con tu nutriólogo dependiendo tu actividad física y tu estado de salud.

Mitos que todos hemos escuchado sobre una cena ligera y nutritiva

“No es bueno cenar porque se sube de peso”

Se cree que saltarse la cena es la solución más rápida y sencilla para bajar de peso o no sentirse sofocados a la hora de dormir. Lo que muchas personas hacen es solo tomar un vaso de agua, comer alguna fruta e irse a descansar.

Realidad: Lo que determina si se sube, se mantiene o se baja de peso es la cantidad y qué alimentos le brindas a tu cuerpo a lo largo del día, así como la actividad física que realices. Sin embargo, para conseguir un sueño reparador se recomienda una cena ligera y nutritiva en la que se incluya proteína, grasas, frutas y cereales.

“Todas las grasas son malas, especialmente si se consumen en la rutina para dormir”

Al pensar que las grasas son malas, hay quienes prefieren evitarlas y consumir la mayoría de sus alimentos cocidos. Es sano, cierto, ¡pero no todas las grasas son malas!

Realidad: La grasa es un nutriente imprescindible en una alimentación equilibrada, existen de diferentes tipos y cada una cumple un rol en el organismo, como transportar vitaminas, formar hormonas y proveer de ácidos grasos esenciales1. Por consiguiente, las grasas forman parte de una cena ligera y nutritiva.

La clave está en poner atención en las cantidades y preferir grasas buenas como las que contienen las nueces, semillas de girasol o almendras que combinan con tu cereal favorito, en lugar de grasas malas y trans que hay en alimentos como la mantequilla, la margarina, el pollo frito, la carne de cerdo, la manteca y la comida rápida.

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En una cena ligera y nutritiva es preferible optar por grasas no saturadas como almendras, nueces y semillas.

“Cenar cereal con leche hace que subas de peso”

Cuando regresas a casa después de un día agotador, en lo último que piensas es en prepararte una cena espectacular, pero tampoco quieres irte a la cama sin comer algo antes, es aquí cuando te decides por un plato de cereal con leche.

Realidad: Cenar un bowl de cereal con leche es ligero y no se relaciona al aumento de peso, pero para que sea una cena nutritiva, además de los cereales y proteína que le aportas a tu cuerpo, es necesario agregar frutas y semillas.

Combina tus #CerealesKelloggsParaTodos, de preferencia aquellos fuentes de fibra o sin azúcar añadido, con frutas como manzana, plátano, pera o fresas, y semillas como nueces, almendras y ajonjolí, para tener una cena completa, ligera, nutritiva y práctica.

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Tu cuerpo necesita una variedad de alimentos para nutrirse, sin embargo, a la hora de la cena estos deben ser en menor cantidad a diferencia del resto de las comidas. Todo depende de la actividad física que realices por las noches y las recomendaciones que te indique tu nutriólogo.

Con ejercicio y una dieta equilibrada puedes disfrutar de una buena salud y un mejor descanso. Y tú, ¿conoces algún otro mito sobre la cena?

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1. Boticario C. (2013). Nutrición y alimentación: Mitos y realidades. Departamento de ciencias analíticas. Facultad de Ciencias UNED. Recuperado de https://revistas.uned.es/index.php/ALDABA/article/view/20535/17024



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